Ban afirmó que las negociaciones de Poznan son de gran importancia para la reunión que se celebrará en Copenhague en diciembre del próximo año, añadiendo que las partes tienen que llegar a un acuerdo en tres puntos clave: unos objetivos de reducción de emisiones a medio y largo plazo para los países desarrollados, reunir más fondos para ayudar a la economía mundial a transformarse en un sistema que consuma menos carbón, y encontrar formas para adaptarse al cambio climático.
Ban expresó su esperanza de que el fondo de adaptación para ayudar a los países en vías de desarrollo a luchar contra los efectos negativos del cambio climático pueda lanzarse lo antes posible.
Xie destacó el papel de la ONU en la lucha contra el cambio climático, afirmando que el organismo ha ejercido una gran influencia política promoviendo la cooperación internacional.
China ha presentado varias propuestas sobre mitigación (de los efectos negativos), adaptación y transferencia de tecnologías, una medida que demuestra el apoyo de China a la causa y su implicación en la cooperación internacional para luchar contra el cambio climático, afirmó Xie.
Xie añadió que los países desarrollados deben dar el primer paso en la lucha global contra el cambio climático reduciendo entre un 25 y un 40 por ciento las emisiones de gases con efecto invernadero hasta por debajo de los niveles de 1990 antes del año 2020.
"Sin unos objetivos a medio plazo, no tiene sentido establecer objetivos a largo plazo en la lucha contra el cambio climático", expresó Xie.
China no escatimó esfuerzos para ahorrar energía, mejorar la eficiencia energética y aumentar el uso de energías renovables en el año 2007, lo que fue suficiente para compensar las emisiones de 835 millones de toneladas de dióxido de carbono ese año, añadió.